Pan de muerto y los sabores de Octubre.
Sobre el origen del pan de muerto, los historiadores siguen debatiendo si su origen fue prehispánico o europeo, específicamente romano. A mí me gusta pensar que es prehispánico, porque se tiene registro de personas dejando ofrendas a los muertos desde la época Precolonial.
El antecesor del pan de muerto podría ser el huitlatamalli, que era algo parecido a un tamal hecho de maíz o la papalotlaxcalli, que era un pan con forma de mariposa y se servía de ofrenda.
El mestizaje transformó el pan de muerto en su textura y un poco en su sabor, pero no en su simbolismo. Cuando se comenzó a usar harina de trigo, para su preparación, se volvió más blando y blanco, pero insisto, que su significado y esencia no dejan de ser prehispánicas.
Las variedades de pan de muerto abundan más en ciudades del centro del país, donde las comunidades indígenas eran más… Hay de distintos sabores, formas y colores… con ingredientes distintos. El principal y más popular a nivel nacional es ese que tiene la forma redonda con los cuatro bordes, se cuenta que éstos simulan cuatro huesos y en medio el cráneo de los difuntos, está representado por una bola que sobresale. El agua de azahar es añadida para darle la esencia que nos recuerde a nuestros fieles difuntos.
Curiosamente, los colores que se usan para celebrar el Día de Muertos son iguales a los que se usan para Halloween. Ésta tradición compartida con el país del norte y europeos tiene origen en el pueblo celta, recordemos que también creían que por estas fechas los muertos cruzaban nuestro plano astral, mucha coincidencia… El color naranja y el sabor de la calabaza de castilla, es el otoño para mí, pero también el anaranjado de la flor de cempasúchil y el sabor a naranja de pan de muerto; pero también lo es el especiado de los cafés “pumpkin spice”. En un mundo globalizado, cada quien vive, siente y le sabe el otoño como mejor se le acomode.
Últimamente, me gusta mucho pensar en el futuro y hacer planes a futuro, por ejemplo, el siguiente Día de Muertos quiero hablar del origen y significado de las calaveritas de azúcar. Imagino muchas fotos coloridas.
Cada año, el Día de Muertos es un recordatorio de que la muerte existe, es latente como nuestras tradiciones y puede estar más cercana de lo que creemos. Aprecio mucho estar vivo por hoy para seguir comiendo… También abrazo el hecho que existe vida después de la muerte para seguir comiendo allá. Espero lleven muchas cosas ricas a mi altar, para al menos volver a esta vida por estas fechas y poder comer alimentos de este plano astral. ¿Qué comida quisieras que hubiera en tu altar para que motivarte a volver a este plano existencial cada Día de Muertos?
